Efecto Ezpiral.-

La diputada federal, Laura Haro Ramírez, presentó una iniciativa encaminada a normar la contaminación auditiva y con esto frenar este problema que crece cada día más sobre todo en las grandes ciudades y zonas metropolitanas como Guadalajara, Monterrey y Ciudad de México.
La legisladora lamentó el que a contaminación acústica es un tema que hasta el momento no se ha tomado en cuenta, pese a que afecta a miles de personas que viven, conviven y desarrollan sus actividades en estas zonas.
El excesivo ruido que se produce en las comunidades urbanas detona problemas de sordera, estrés, ansiedad, ira y depresión; y esto a su vez, impacta en el incremento de los índices de violencia intrafamiliar, en contra de la mujer o en la convivencia social.
En la propuesta se solicita que se incluya en la Ley en la materia los decibeles considerados en la Norma Oficial Mexicana (NOM-081-SEMARNAT-1994) para zonas residenciales, zonas escolares y zonas industriales; que se expida una Norma Oficial Mexicana que regule el nivel de decibeles permitidos a vehículos automotores por escapes, bocinas y equipos de sonido y que se sancione a quienes no respeten los decibeles que se establezcan en la Norma en la materia para vehículos.
Cabe señalar que para que el ruido se pueda considerar aceptable, debe rondar entre los 50 y 54 decibeles para actividades diurnas y 40 a 44 decibeles en actividades nocturnas. Sin embargo, en ciudades con alta densidad poblacional como Guadalajara, se llegan a registrar más de 73 decibeles en el ruido producido.