Jalisco cuenta con el primer reclusorio con clínica de hemodiálisis en el país

 

Juan Carlos Huerta Vázquez

La primera clínica de diálisis para enfermos renales dentro de un centro carcelario en el país, se ubica en el complejo de reinserción social de Puente Grande, a cargo de la Fiscalía General de Jalisco.

Las instalaciones se habilitaron a un costado del área médica del reclusorio para sentenciados, donde se cuenta con una módulo y capacidad instalada para realizar seis hemodiálisis diarias y un aparato para infusión.

La clínica para hemodiálisis disminuirá los costos en traslados al Hospital Civil de Guadalajara, y de la misma forma, se evitan riesgos en la seguridad al excarcelar a los internos con padecimientos de riñón, y es que poco menos del 10 por ciento de la población penitenciaria presenta un grado de enfermedad renal.

El Fiscal de Reinserción Social de Jalisco, Carlos Antonio Zamudio Grave, indica «otra ventaja de la clínica será la atención personalizada que se podrá dar a los internos, además de un seguimiento oportuno de cada caso, y nos ponemos a la vanguardia en el respeto a los derechos humanos».

Al momento son siete varones y una interna, que requieren del tratamiento de hemodiálisis, que se aplica sólo a quienes tienen el rango más avanzado del padecimiento renal, y la atención debe provenir de personal especializado, «dependiendo de la gravedad de su problema, podemos decir que por lo general una persona con esta enfermedad requiere ser llevada para su atención alrededor de tres veces a la semana y su tratamiento dura de tres a cinco horas”.

El funcionario agrega que el contar con una unidad de diálisis en el centro penitenciario, garantiza una mejor calidad de vida para los internos afectado por padecimientos renales, «recibirán atención personalizada, y no tendrán que esperar su turno en el hospital; en muchas ocasiones los internos excarcelados eran remitidos al nosocomio y en repetidas ocasiones eran regresados sin que les hiciera nada, ya que por la gran cantidad de pacientes no podías ser atendidos y si se presentaban complicaciones, teníamos que llevarlos a una clínica particular para que recibieran su tratamiento y nosotros costear el tratamiento».

Los médicos de la Comisaría para Sentenciados fueron capacitados en el manejo del equipo por la empresa INTEPRO con el fin de cumplir con los estándares y protocolos que autoriza la Secretaría de Salud, y por lo pronto, cuentan con el apoyo de un nefrólogo y de enfermeras especializadas en hemodiálisis.

La Unidad de Hemodiálisis y Oncología fue inaugurada este miércoles, el siguiente paso es integrar un programa de prevención para los internos en el que se diagnostiquen enfermedades crónicas como la diabetes e hipertensión, que afectan a más de un tercio de la población penitenciaria, que supera los 15 mil reclusos; así mismo se gestionará con la Secretaría de Planeación, Administración y Finanzas del estado de Jalisco, un recurso adicional para la compra de reactivos.

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