Por Mario Díaz
El Partido Encuentro Social a diez años de que se aprobó en el Distrito Federal la despenalización del aborto, reafirma su postura y su impulso a la institucional de la Adopción.
En rueda de prensa, la diputada federal por Jalisco, Norma Edith Martínez Guzmán, puntualizó que respecto a la iniciativa que presentó se encuentra en el Senado, ya aprobada por la Cámara de Diputados, para destrabar los procesos para la liberación de la patria potestad, de niños que en adelante podrán ser adoptados, y por tanto, aportará a la adopción como alternativa ante la decisión de la mujer de no ser madre, sin menoscabar el derecho a la vida de otro ser humano, en este caso su hijo.

La legisladora hizo un encarecido y enérgico llamado a la ultraderecha y a la que consideró mal llamada progresista izquierda a abstenerse en adelante de usar temas sociales como bandera política y económica, y a dejar de «polarizar a la sociedad con enfrentamientos de odio que han hecho ya muchísimo daño a nuestro país y a miles, quizá millones de personas.
«Hacemos un llamado a resolver los problemas más polémicos de nuestro país mediante el diálogo, en encuentro , la comprensión del otro y la capacidad de resolver con gran genio e inteligencia lo que el odio no ha podido resolver. México merece paz, la mujer merece justicia y nuestros hijos el derecho a vivir, sin discriminación por edad», destacó la legisladora jalisciense.
Destacó que su partido Encuentro Social y el Partido de la Vida y la Familia, creen que no hay seres humanos más valiosos que otros y que la vida de todo ser humano debe ser defendida desde el primer momento de su existencia.
Por lo que consideró que hoy no hay nada qué festejar.
«Se habla de que triunfó el derecho de la mujer a decidir ser o no madre; se habla de reducir la mortalidad materna por abortos clandestinos; se habla de cuestiones que incluso no tienen que ver con esta reforma, como el caso de violación o peligro de muerte de la madre, pues ya estaban contempladas en todos los códigos prácticamente desde antes.
«Casi ninguna mujer acude al homicidio intrauterino por la simple reivindicación de ser igual que el hombre la inmensa mayoría de las mujeres que deciden abortar lo hacen por circunstancias que no hemos querido escuchar, por fallos del estado y del gobierno: falta de oportunidades, pobreza, machismo, violencia, políticas educativas, insuficiencia de los servicios de la salud, entre otros».
Destacó que la mujer no aborta por negarse a ser madre; aborta por desesperación y abandono. Y puntualizó que no es una ideología la que ha posicionado el aborto, sino que ha sido la injusticia como sistema la que lo ha hecho.
Finalizó diciendo que esta polarización irracional de este tema ha provocado la muerte no solo de más de 176 mil bebés en hospitales públicos, según el sistema de información de interrupción legal del embarazo de la Secretaría de Salud, aunque hay organismos que sumando a los hospitales privados esta cifra pudiera llegar al millón, durante estos diez años.